Rodríguez Bernal Abogados nace como natural extensión, hacia Marbella, del Despacho Bufete Olaverri con sede en Torremolinos desde 1985. La historia del despacho se puede resumir en pocas líneas.
A finales de los años 90, Antonio Pedro Rodríguez Bernal, procedente de la empresa privada, comienza a trabajar como pasante en Bufete Olaverri, bajo la tutela de Joaquín Olaverri Oreja, fundador de Bufete Olaverri y Cónsul de Senegal en Andalucía y Murcia. En dicho despacho coincidió con Francisco Javier Jiménez Guerrero que procedía de la Escuela de Práctica Jurídica.
Fieles a la consigna «el abogado debe acercarse al cliente allá donde esté», la expansión del despacho de Torremolinos se hace en dos direcciones. Hacia Málaga, bajo la dirección de Jiménez Guerrero; y hacia Marbella, por el impulso de Rodríguez Bernal.
Incrementando esa conexión inicial, los tres despachos han funcionando con perfecta coordinación y permanente intercambio de recursos técnicos, materiales y humanos, aproximándonos al cliente allí donde nuestra presencia se hiciera necesaria.
En la actualidad, gracias a esta armonía de recursos, podemos reunir un experimentado conjunto de profesionales, abogados y economistas, adaptándonos a las peculiaridades del cliente, reduciendo los costes, y mejorando el binomio calidad-precio en beneficio de nuestra distinguida clientela. Nuestra acreditada experiencia garantiza un servicio responsable, eficaz y de primera calidad.