«Los plazos de reclamación cuando un cuadro se vende fuera del país sin consentimiento son muy cortos y en la mayoría de las ocasiones se acaba perdiendo» explica Antonio P. Rodriguez Bernal abogado y especialista en el derecho aplicable al Mercado del Arte, Patrimonio Histórico y Antigüedades. «Muchas veces aunque esa venta sea ilícita la compra la realiza un tercero de buena fe y se acaba perdiendo. En este caso tratándose de un cuadro tan conocido la buena fe es siempre muy discutible», añade Rodríguez.
Hoy, 5 de agosto de 2015, nos mencionan en el Diario El Mundo, edición nacional, papel, en el artículo «Picasso se queda en casa», sobre la incautación en Córcega del cuadro «Cabeza de una mujer joven» propiedad de Jaime Botín.
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